Las puertas de Carlos Pellegrini, Corrientes, se abren a través de un antiguo puente de maderas viejas, el cual le agrega desde el comienzo de esta aventura, aires de antaño.
Con calles de tierra nombradas en guaraní, con una plaza central repleta de verdes y sin veredas, más el silencio y la naturaleza reinante, hacen de la ciudad de Carlos Pellegrini, un verdadero refugio natural, un necesario respiro para el alma.
Renombrada por ser la bienvenida a los Esteros del Iberá, Carlos Pellegrini, Corrientes, ofrece una amplia gama de alojamientos para que el visitante sea parte de la magia de esta reserva natural.